Ignacio Castellanos un alero de lujo con un tiro de lujo.

IGNACIO CASTELLANOS BALLESTEROS, llegó a Guadalajara allá por el verano de 1991 en el segundo año del convenio firmado entre el C.B Guadalajara y el Real Madrid, Alero de 2,05 nacido en Madrid el 7/03/1973 ha sido uno de los jugadores que con altura para jugar de ala-pivot siempre jugó de alero y fue quien enseño a tirar a Jorge Garbajosa.

Su primera temporada en Guadalajara, en la temporada 1991/92 a las órdenes de Chuchi Carreras, fue algo discreta en cuanto a números y minutos jugados y su protagonismo fue algo escaso, aun así no dejó de ser uno de los jóvenes a seguir por el Real Madrid su club de origen.

Ya en su segunda temporada en Guadalajara, a las órdenes de Ángel González Jareño, su progresión fue en aumento a medida que iba pasando la temporada, aunque su continuidad en Guadalajara era una incógnita ya que el entrenador del Real Madrid, Clifford Luyk, quería que entrenase con el primer equipo y pasase a formar parte de la plantilla, pero gracias a Ángel González Jareño el jugador volvía a recalar en Guadalajara donde su papel dentro del equipo seria de importancia vital y sus números serian claves para la consecuición del ascenso y el subcampeonato de liga.

Nacho siempre contó con una altura de privilegio para jugar en posiciones interiores, pero siempre tuvo tendencia al juego exterior lo que le llevó a ser uno de los mejores aleros altos tiradores del baloncesto español. Su buena mano para el tiro le valió para ser el máximo anotador de la LIGA LEB y ser uno de los más valorados de la temporada. Ciudades como Guadalajara, Vitoria, Burgos, Salamanca, Fuenlabrada, Inca, su paso por Alemania, Córdoba, La Palma y su ultimo equipo en LIGA EBA, el Real Canoe, donde ofrecio los últimos años de carrera.

Una dilatada carrera que en su día le llevó a Vitoria, donde estuvo una temporada, en la que coincidio con Jorge Garbajosa, en la que tuvo tiempo de enseñar al que por entonces era un jovencisimo jugador en edad cadete y que según el mismo Garbajosa, de no ser por Nacho jamás hubiera aprendido a tirar. Jorge reconoció que gran parte del éxito de su carrera fue gracias a Nacho.

También pudo desmostrar su valía como jugador en la LIGA ACB donde jugó dos temporadas en dos equipos diferentes como Salamanca y Fuenlabrada, en Salamanca a las órdenes de su gran amigo Fernando Merchante y Ricardo Hevia, Pero donde más lecciones de tiro y de su juego ha dado ha sido en la LIGA LEB, sobretodo en Córdoba, jugando a gran nivel para luego pasar a jugar en LEB 2 en LA PALMA donde estuvo dos temporadas en las que demostró toda su clase más allá de la línea de tres puntos, siendo uno de los jugadores más importantes del equipo.

Después de pasar por las categorías LEB, acabaría su carrera batallando en la LIGA EBA en el equipo del Real Canoe donde pondría punto y final a su carrera, haciendo grandes temporadas y coincidiendo en el mismo grupo de liga donde también militaba el C.B Guadalajara, pero el día que el equipo madrileño tuvo que jugar en Guadalajara no contó en sus filas con este ex jugador morado al que los más veteranos esperaban volver a ver.

Desde su paso por Guadalajara, Nacho solo a vuelto en tres ocasiones para ver al equipo alcarreño y desde entonces no ha regresado más.

En su paso por Guadalajara nos dejó un gran recuerdo con dos campañas extraordinarias a nivel humano y como gran jugador donde los haya que, gracias a su juego, nos dejó ver una de las mejores manos para el tiro de tres puntos que hayan pasado por Guadalajara.

Sirvan estas palabras como homenaje a este clásico del baloncesto alcarreño que a día de hoy trabaja y vive por tierras madrileñas y al que desde el baloncesto de lo que fuimos y lo que somos le mandamos un abrazo enorme